Guatemala inicia el 2025 con importantes desafíos políticos y económicos, mientras el país se prepara para acontecimientos que podrían redefinir su rumbo en los próximos meses.
La investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos el próximo 20 de enero emerge como uno de los factores más influyentes para la nación centroamericana. Este evento podría impactar significativamente las relaciones bilaterales y las políticas migratorias entre ambos países.
Nuevo escenario político
El presidente Bernardo Arévalo comenzará su segundo año de gobierno el 14 de enero, con un presupuesto cercano a los Q150 mil millones y aparente respaldo legislativo para impulsar su agenda.

Desafíos institucionales
La fiscal general María Consuelo Porras iniciará en mayo su último año al frente del Ministerio Público, institución que ha protagonizado tensiones políticas significativas con el actual gobierno.
Impacto migratorio
Las políticas migratorias de Trump podrían afectar severamente a Guatemala, que registró niveles históricos de remesas en 2024. El nuevo gobierno estadounidense plantea deportaciones masivas y cierre de fronteras.
Panorama legislativo
El Congreso, bajo la presidencia de Nery Ramos, mantiene una aparente alianza con el oficialismo. Sin embargo, el respaldo a nuevas iniciativas dependerá de la coyuntura política y los intereses particulares.
El analista Renzo Rosal señala que el principal reto será mantener la estabilidad política y evitar crisis derivadas del cambio presidencial en Estados Unidos. También destaca la importancia del proceso de elección del próximo fiscal general en 2026.